Durante el embarazo y la lactancia los requerimientos de calcio aumentan. Sin embargo esto no significa que la mamá necesite ingerir más calcio.
De acuerdo al National Institute of Arthritis and Musculoskeletal and Skin Diseases, “las mujeres mayores de 18 años deben consumir 1,000 miligramos de calcio al día”. Además refiere, que una mayor ingesta de calcio (sea por alimento o por suplemento) no evita la pérdida de calcio durante el embarazo y la lactancia.
Los cambios en la densidad ósea son temporales, por lo que una correcta alimentación a lo largo del embarazo, lactancia y post-lactancia es importante para recuperar la densidad ósea.
Por otro lado, hay factores que podrían generar la pérdida de dientes durante el embarazo. Uno de ellos son los conocidos “antojos”. Comer constantemente durante el día y no realizar una correcta higiene bucal puede generar acumulación de bacterias, placa bacteriana y caries.
Si se dejan las caries sin tratar, la caries seguirá avanzando en el diente hasta llegar al nervio y de no tratarse adecuadamente podría perderse el diente.
Otro factor son los cambios hormonales durante el embarazo los cuales favorecen que las encías sean más propensas a la inflamación. Así, una pequeña presencia de placa bacteriana puede causar que haya una reacción inflamatoria exacerbada. Eso hace que las encías se “hinchen” mucho, se vean rojas y sangrantes. Esta gingivitis a largo plazo puede convertirse en una periodontitis y finalmente el diente puede caerse debido a la destrucción de hueso en la zona.
¿Cómo prevenir la pérdida de dientes durante el embarazo?
Como se mencionó anteriormente, la descalcificación no está relacionada con la pérdida de dientes durante el embarazo pero las caries y la gingivitis sí.
Ambas pueden prevenirse con una rutina de higiene dental adecuada y visitas al dentista. La higiene dental debe consistir en cepillarse los dientes, usar hilo dental y enjuague. Mucho mejor será la higiene si se complementa con el uso de un irrigador de agua.
El uso del chorro de agua limpiará aquellos espacios donde no puede limpiar el cepillo dental.
Es muy recomendable que la higiene dental sea realizada luego de ingerir algún alimento.
Las visitas al dentista en este período gravídico, deben hacerse para realizar un chequeo preventivo en la que se detectarán caries, enfermedades de encías y el dentista determinará si es necesario una profilaxis dental.
En caso de que notes algunos de los síntomas descritos anteriormente es recomendable que solicites una evaluación del dentista.
¿Qué hacer si se cayeron mis dientes durante el embarazo?
En caso de que hayas perdido algún diente durante el embarazo, hay solución:
- Implantes dentales: es la mejor alternativa de tratamiento para reemplazar un diente perdido. Sobre el implante dental que funciona como una “raíz artificial” del diente, se colocará un pilar y una corona. Esto dará un aspecto natural y no se notará al sonreir. Además, esta alternativa evita que se pierda hueso en los maxilares.
- Puente o prótesis convencional: Estas alternativas consisten en reemplazar el diente perdido mediante aparatos que se sujetan en los dientes remanentes para devolver la estética y función.
En el caso de preferirse un puente fijo se requerirá de realizar desgastes (tallados) en los dientes que serán utilizados como soportes.
En el caso de preferirse un aparato removible el reemplazo del diente perdido estará sujetado mediante “ganchos” en los dientes remanentes.
En resumen, puede decirse que la descalcificación durante el embarazo no es la causante de perder dientes durante el embarazo o la lactancia sino que es la acumulación de bacteria y los cambios hormonales lo que hace la encía más propensa a inflamarse y generar una gingivitis.
Nuestros dentistas serán tus aliados para mantener una salud bucal adecuada ya sea para prevenir o ayudarte a solucionar la pérdida de un diente.
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