La onicofagia es el hábito compulsivo de morderse las uñas y las consecuencias negativas que genera en tu salud oral va mas allá de la estética.
El mordisqueo constante de las uñas puede dañar el lecho ungueal y la raíz de las uñas. Además, puede provocar complicaciones como:
- La aparición de infecciones en los labios.
- Desgastar el esmalte dental llegando a fracturar o astillas los dientes sufriendo un desgaste prematuro.
- Como consecuencia del último punto, puede producir un aumento en la sensibilidad dental.
Por ello, es importante que evites morderte las uñas. Algunas sugerencias para ello son, mantener tus manos ocupadas con una pelota antiestrés o colocarte un esmalte especial con un sabor desagradable.